22/2/11
BAÑOS DE SANGRE EN LA ARENA
José Rafael Revenga Febrero 22, 2011
El mundo creyente en los derechos humanos ve con ojos atónitos llenos de estupor condenatorio la masacre de civiles en varias ciudades libias. Aún mayor, de ser posible, es la atención prestada a dichos hechos por los dictadores amenazados por protestas multitudinarias y por las autocracias que inician solo una primera etapa de apertura hacia el pluralismo civil.
El desmoronamiento progresivo e inevitable de la más férrea, irracional y ferozmente represiva dictadura de la región que se extiende desde el extremo del Sahara occidental hasta el confín oriental de Irán, se convierte en el "efecto catalizador", en la "segunda ola" de nuevas y apremiantes exigencias. Los gobernantes quienes se han visto obligados por la presión popular de acometer transformaciones pero que no han concluido el diseño y mucho menos la ejecución de la transición hacia nuevos formatos para sus regímenes, se encuentran justificadamente temerosos de la intensificación del descontento que reina en la "calle árabe". Si cae Gaddafi se inicia una nueva temporada en el destronamiento de varios jefes de estado.
Túnez y Egipto se caracterizan por haber depuesto a sus presidencias dictatoriales matusalenicas pero quizás no estén desmontando con la suficiente velocidad sus anquilosadas estructuras de poder. Una poda, aún del ramaje más alto, no es lo mismo que desenraizar un árbol vencido.
Bahréin y Yemen presentan otro perfil común a ambas. Las respectivas monarquías han iniciado un proceso de apaciguamiento y de negociaciones incipientes cuyo ritmo seguramente no será aceptado por los activistas pro democracia.
Además, sus ejércitos han debido registrar "los baños de sangre" y ""miles de muertos" prometidos por Saif al-Islam Gaddafi -- el hijo supuestamente pro Occidente-- en su alocución de unos 40 minutos televisada el domingo 20 de febrero y trágicamente cumplidos el próximo día por la fuerza aérea a las órdenes de la demencial familia gobernante de Libia. No existe mayor señal de debilidad de una dictadura que el utilizar aviones de guerra para bombardear a su propia gente tal como lo ocurrido el domingo 20 y el lunes 21 en Trípoli. La condena internacional que ahora se asoma con mayor nítidez hará pensar a muchas FF.AA. que "todo o nada", como estrategia dictada por órdenes superiores, no es una opción válida ni deseable.
¿CAÉ GADDAFI? ¿CUÁNDO Y CÓMO?
Antes de analizar el impacto venidero a muy corto plazo sobre las 4 naciones agrupadas en las dos etiquetas mencionadas, debemos tratar de prefigurar cómo y cuándo puede terminar de desmoronarse la dictadura libia.
El lunes 21 de febrero un video transmitido por Reuters muestra a Gaddafi supuestamente en Trípoli y negando la mención de su posible éxodo a Venezuela. El "Líder Hermano" hace uso de un paraguas para protegerse de las inclemencias ambientales:
Otro video del mismo servicio informativo muestra una realidad más torrencial al mostrar las manifestaciones de protesta que alcanzan a Trípoli a solo cinco días de haberse iniciadas las demostraciones:
Las informaciones provenientes de Libia son muy fragmentarias y dífíciles de convalidar. El servicio de conexión con IN fue cortado abruptamente el viernes 18 a las 4:15 pm (hora local).Por eso las informaciones son aparentemente contradictorias: Qaddafi menciona que el blanco de los ataques aéreos son depósitos de municiones. Al contrario, los dos pilotos fugados quienes buscaron refugio en la isla de Malta declaran que los aviones de guerra fueron utilizados en contra de quienes protestaban.
Por otra parte, el hijo de Gaddafi afirmó en su discurso deshilachado del domingo 20: "Seguiremos luchando hasta el último hombre que quede de pie..más aún hasta la última mujer de pie... no dejaremos a Libia en manos de los italianos ni de los turcos". Es muy difícil de interpretar la referencia a esos dos pueblos ya que en la actualidad son grandes socios comerciales de la nación libia. En particular, Libia tiene 7,5% de las acciones del equipo Juventus.
La posible referencia a una situación colonizadora anterior es paradójica pues la industria petrolera libia ha quedado en manos de más de cien empresas extranjeras lo cual puede explicar los grados de convivencia con las potencias occidentales durante las últimas décadas.
En la "niebla informativa" propia de este tipo de situaciones ambas versiones son verosímiles. De ser así, es posible que el bombardeo de las instalaciones militares obedezca a la necesidad de suprimir a efectivos militares en rebeldía. En efecto, ya hay evidencia de que Qaddafi mando a ejecutar a soldados quienes se resistían a disparar al público.
Una primera vertiente de la realidad sería el alzamiento continuado de la región oriental del país -Cirenaica- cuyas principales ciudades ya están bajo el control de los manifestantes. No es fácil imaginar una retoma de esas ciudades por las fuerzas de seguridad. En la práctica, surgiría una tensa situación de guerra civil la cual precipitaría la caída del Coronel dado que es probable que la mayor parte de las FF. AA. no esté dispuesta a guerrear en contra de los ciudadanos. Gaddafi quedaría bunkerizado en sus cuarteles de emergencia resguardados por los mercenarios provenientes del Sahel y Tchad y por los contingentes de su guardia personal.
Si las manifestaciones se apoderan de Trípoli, Gaddafi quedaría de hecho aislado. El lunes 21 varios grupos de los participantes en las protestas asaltan y toman las instalaciones de la televisora oficial en Trípoli lo cual hace pensar que hay un control civil de algunas zonas de la capital lo cual era impensable hace unos pocos días. Así mismo, los manifestantes han incendiado el gran edificio en donde se alojan las oficinas de los "Comités del Pueblo".
Otra potencial realidad es que los manifestantes pierdan el impulso y la determinación exhibida durante los últimos 6 días y el Coronel retome paulatinamente el control del país con la cooperación de los jefes tribales. Esta es la realidad que Gaddafi pretende imponer. Por ahora, las declaraciones de testigos y las tomas de video por celulares confirman los ataques aéreos del lunes 21 de febrero a Fashlum and Tajura, dos suburbios de Trípoli. Esta información fue también corroborada por los pilotos de los dos Mirage que se fugaron y aterrizaron en Malta.
El embajador libio en Washington da unas declaraciones inesperadas el 21 de febrero alentando a los manifestantes a no perder el impulso y a no negociar a fin de salir victoriosos. El próximo día en una entrevista en ABC News el embajador renuncia a su cargo:
Igualmente han renunciado casi todo el personal del consulado libio en Londres y el representante ante la influyente Liga Árabe.Todo esto ocurre al mismo tiempo que durante la noche del lunes 21 helicópteros continuan disparando en contra de los ciudadanos y los mercenarios africanos importados por Gadaffi transitan por las calles de Trípoli a bordo de jeeps artillados. Human Rigths Watch contabilizó 61 victímas el domingo anterior en dicha ciudad.
Gaddafi en una prologada e incoherente alocución al final de la tarde del martes 22 utiliza todas las frases propias del vocabulario de los dictadores cuando se dan cuenta que la marea se les volteó: "moriré como un martir", lucharé "hasta la última bala", "hasta la última gota de mi sangre", "condenados aquellos quienes fomentan protestas".
La comunidad internacional no encuentra respuesta efectiva frente a la evidencia de la matanza. Todos mencionan que la situación es "inaceptable" y que la ofensiva en contra de los manifestantes pacíficos debe cesar. Son las típicas expresiones prepago en la diplomacia internacional. que buscan cómo evadir la fijación de una línea firme.
No obstante, a mediados de la semana del 21 de febrero hay varias realidades por emerger que obligarán a la formulación de una estrategia punitiva que derroque al sanguinario "Hermano":
i)cada día se conocen más atrocidadades cometidas por las llamadas fuerzas de seguridad,
ii) el número de víctimas y heridos aumentará significativamente.
iii) los mercenarios seguramente estarán fuera de control por varios día más.
iv) las manifestaciones arreciarán y, en función de ellas, las respuestas represivas sin piedad.
v) será muy difícil y costoso arrebatarle el control de la zona oriental a los civiles.
vi) son previsibles micro encuentro bélicos anticipatorios de una guerra civil entre las diferentes tribus y regiones,
vii) los puertos de embarque de petróleo y gas se paralizarán en dos o tres días --ya el gobierno italiano ha anunciado que sus inventarios de gas alcanzan para solo 30 días.
viii) las exportaciones de crudo libio suman cerca de 1.500.000 b/d lo cual es un suministro significativo cuya merma ocasionaría graves desajustes en el mercado global y especialmente en Italia que consume la tercera parte de ese volúmen.
ix) mientras Libia se mantenga en un conflicto mortífero entre los civiles y las fuerzas de seguridad palaciegas o comandadas desde una carpa se corre el riesgo inminente de un efecto de contagio renovado en el Yemen, Bahréin, Egipto, Túnez y Marruecos.
x) la estrategia de Gaddafi es acometer el genocidio de su propia gente en el sector occidental del país ya que en esa zona sus militares mantienen el control y quienes protestan estan lejos de imponerse por más numerosas que sean sus concentraciones. De ser así, el mundo presenciará una masacre y el país se fraccionará en dos regiones antágonicas reminiscentes de la guerra civil española.
¿Qué se puede y que se debe hacer? se pregunta la opinión pública mundial. Recordemos que las Naciones Unidas asignaron una fuerza multinacional para controlar la matanza en los Balkanes en la década de los 90s.
Otra propuesta presentada el martes 22 es la del senador demócrta John F. Kerry quien exige el inmediato cese de operaciones de las petroleras USA en Libia.Un clérigo muy influyente lanzó un fatwa o decreto religioso conminando a cualquier soldado en la proximidad a disparar para acabar con el desenfreno personal.
Otro acontecimiento inesperado es la declaración de más de 50 estudiosos islámicos quienes anunciaron un fatwa -mandato religioso de obligatorio cumplimiento- indicando que el gobierno y quienes lo apoyan han "demostrado una total y arrogante impunidad y han continuado e intensificado sus crímenes sangrientos en contra de la humanidad". "Por lo tanto, continua la Red de Ulemas Libres de Libia, han demostrado una total infidelidad a la guía de Dios y a su amado Profeta. Esto los convierte en inmerecedores de cualquier obediencia y apoyo y hace que rebelarse en contra de ellos por todos los medios, sea un deber ordenado por la divinidad".
Hay otras señales de implosión: el ministro de justicia y el embajador en la India han renunciado a sus cargos por estar en desacuerdo con la violencia desatada.
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Hola:
ResponderEliminarHe visto muchos correos de familiares de diplomáticos venezolanos queriendo salir de Tunes y sin que la Cancillería haya dicho nada ni tenga un plan de contingencia. Me imagino que si lo implementan estarían reconociendo lo grave de la situación, pero ponen en peligro la vida de venezolanos quienes pueden ser objeto de ataques por sus muy conocidas labores intervencionistas en otros países para promover el socialismo o por la negativa a condenar los delitos, por parte del Estado Vzlano, que alguno ya califican de genocidio cometidos por la momia insepulta de Gadaffi en contra de manifestantes desarmados.