LA NUEVA ERA DIGITAL

José Rafael Revenga                                                   Mayo 05, 2013

Nadie entiende el mundo en que vivimos y menos el que se viene. Un par de autores -Eric Schmidt y Jared Cohen-  ensayan una nueva tentativa de comprensión en La Nueva Era Digital (The New Digital Age) que salió del horno el mes pasado.

Su subtítulo peca de cierta grandiosidad: “Rehaciendo el Futuro de Personas, Naciones y Empresas”. Afortunadamente, para no pecar de totales sabihondos, en la primera frase del texto, los autores resaltan lo que todos hemos empezado a vivir:

“La Internet es el mayor experimento que involucra la anarquía en la historia”. 

Puesto así, al lector se le aviva de inmediato la curiosidad.

HACE 20 AÑOS: LA PRIMERA PÁGINA WEB

El experimento ya dejó de serlo y hoy, a los 20 años del estreno de la primera “página” web, la transformación introducida por una nueva tecnología comunicacional está por envolver, literalmente, a todo el mundo.

Nadie, ni el mismo inventor, el británico Timothy Berners-Lee, sospechaba que la sencilla descripción daría lugar a una mutación radical de la manera de vivir y convivir :

“The WorldWideWeb (W3) is a wide-area hypermedia information retrieval initiative aiming to give universal access to a large universe of documents”.

Los autores no son unos neófitos desinteresados. 

Schmidt (58 años) fue presidente ejecutivo de Google desde el 2001 hasta el 2011. Hoy preside la junta directiva de Google y es miembro de los “trustees” de las universidades Carnegie-Mellon y Princeton. En enero del 2013 visitó a Corea del Norte a pesar de las tensiones reinantes entre ese país y la comunidad internacional.

A los 31 años, Cohen es director de Google Ideas y figura en la lista de TIME de las 100 personas más influyentes en el mundo para el 2013.

Su actual responsabilidad, como director de Google Ideas (un think-do tank) lo orienta a explorar como la tecnología puede hacer que la gente confronte las amenazas surgidas del conflicto, la inestabilidad y la represión. Su receta operacional es conectar usuarios, expertos e ingenieros.

A LOS 20 AÑOS: MÁS DE 2 MILLARDOS DE PERSONAS

El tema central de la obra es cómo la ubicuidad acelerada y englobante de la interconectividad afectará todos los aspectos de la vida de casi todo habitante del planeta. Si bien hay algo más de 2 millardos de personas conectadas en alguna forma con IN, los autores estiman que la incorporación de los más de 5 millardos todavía por fuera, no tardará. Por ejemplo, es difícil estimar el impacto de la interconectividad en la población del continente africano cuya inmensa mayoría hasta hace poco no disponía ni de una línea de telefonía fija.

Los siete capítulos del libro  son: “Nuestras personas en el futuro”, “El futuro del conflicto, el combate y el intervencionismo”; “el futuro de la identidad  de la ciudadanía”; “El futuro de las naciones-estados”, “El futuro de la revolución”; “El futuro del terrorismo” y “El futuro de la reconstrucción”.

LOS TEMAS DE LA NUEVA ERA DIGITAL

Temas como la libertad de expresión  magnificada la cual tiene su contrapartida en la pérdida de la privacidad; la fuerza del “enjambre colectivo” que se engendra por una interconectividad espontánea en torno a temas culturales, sociales y políticos frente a estructuras gubernamentales inflexibles; el surgimiento de China como primera nación cuyo escape del atraso coincide con el inicio de la “nueva era digital” y la amenaza de un ciber-ataque terrorista que pueda inmovilizar toda la parrilla eléctrica de una nación.

Dado el conocimiento de la casi inescrutable infraestructura de la IN que posee Schmidt y de la visión de largo alcance de Cohen, el libro nos da a conocer la existencia de programas como el CRASH (“Clean-Slate Design of Resilient, Adaptive, Secure Hosts) actualmente en una etapa de desarrollo acelerado por la célebre DARPA del Pentágono. (hacer clic).

LA INTRODUCCIÓN

Extraigo algunos párrafos de la introducción:

"En la medida en que el espacio de IN crece, nuestra comprensión de casi cada uno de los aspectos cambiará, desde las minucias de nuestras vidas diarias hasta asuntos fundamentales como la identidad, las relaciones y aún nuestra propia seguridad. Por medio del poder de la tecnología, antiguos obstáculos para la interacción humana, como la geografía, el idioma y la información limitada, se vienen abajo y una nueva ola de creatividad y potencial humana está en ascenso. La adopción masiva de IN está impulsando una de las transformaciones social, cultural y política más excitantes de la historia; y a diferencia de otros períodos de cambio, esta vez los efectos son globales. Nunca antes en la historia tanta gente de tantos lugares, han dispuesto de tanto poder en sus manos. Y si ésta no es en absoluto la primera revolución tecnológica en nuestra historia, es la primera que hará posible para casi todo el mundo, ser propietario, desarrollar y diseminar contenidos en tiempo real sin tener que depender de intermediarios".

"La proliferación de tecnologías de comunicación ha avanzado a una velocidad sin precedentes. En la primera década del siglo 21, el número de personas conectadas a IN a nivel mundial aumentó de 350 millones a más de 2 millardos. En el mismo período, el número de suscriptores de teléfonos móviles creció de 760 millones a bien más de de 5 millardos (hoy en día es más de 6 millardos). La adopción de estas tecnologías se está difundiendo hasta los más más reconditos lugares del planeta, y en algunas regiones del mundo, lo hace aceleradamente".

"Para el 2025, la mayoría de la población mundia habra, en una generación, emigrado de una situación virtualmente sin acceso a información no filtrada  gozar de un acceso toda la información del mundo a través de un instrumento que se puede tener en la palma de la mano. Si el ritmo de innovación tecnológica se mantiene, la mayoría de los 8 millardos de habitantes en el Tierra estarán en línea".

"A todo nivel de la sociedad, la conectividad continuará siendo más económica y práctica en modos sustanciales. La gente tendrá acceso a redes de IN inalámbricas y ubicuas varias veces más económicas. Seremos más eficientes, más productivos y más creativos. En el mundo en desarrollo, los "hotspots" públicos inalámbricos y las redes domésticas de amplio ancho de banda se reforzarán las unas a las otras. Así, se extenderá la experiencia en línea a lugares en los cuales hoy en día, la gente no disfruta de telefonía fija. Numerosas sociedades saltarán una generación tecnológica entera".

LA CONCLUSIÓN CENTRAL

Una de las últimas conclusiones de los autores se centra sobre el enigma cuya resolución dictaminará el impacto de la era digital sobre nosotros:

"Lo que vaya a emerger en el futuro, y lo que hemos tratado de articular es la historia de dos civilizaciones: Una es física y se ha desarrollado durante miles de años, y la otra es virtual y todavía está en sus primeras fases de formación".

En una conversación  (El impacto de las tecnologías de disrupción) promovida por McKinsey & Company, Schmidt habla justamente del empalme de lo físico, en este caso nuestra biología, con lo digital:

"La manera de ver la tecnología no es el aspecto que despierta nuestro interés porque hay tantas interesantes. A lo que hay que estar atentos es a aquellas que tienen un chance de tener un impacto de magnitud sobre mucha, mucha gente, o sobre amplios segmentos de la sociedad". 

"Nosotros, en el tiempo de una sola vida, vamos de una pequeña elite con acceso a la información a esencialmente cada quien en el mundo con acceso a toda la información del mundo. Eso tiene gigantescas implicaciones para la privacidad, las comunicaciones, la seguridad, el comportamiento de la gente, la manera de difusión de la información, la censura, como se comportan los gobiernos, etc". 

"Esa es la narrativa primaria hoy en día, pienso yo. Ella transforma la educación. Ella cambia la aplicación de la propiedad intelectual, cambia el modo en que operan las empresas, cambia los procesos de los medios de comunicación y así casi sin fin".

EL IMPACTO DE LO DIGITAL SOBRE LA BIOLOGÍA

"La próxima a ser transformada es, sin duda, la biología. Las mismas herramientas y técnicas para el cálculo combinatorio, el tipo de uso analítico que le damos hoy a los computadores, cuando los aplicamos a a los sistemas biológico, tiene un mayor impacto aún. Cuando empezamos a decir. " Vamos a tomar al mundo analógico de la biología -como funcionan los genes, como se desarrollan las enfermedades- y las ubicamos en un marco digital, y procedemos a calcular por un rato a aprender computacionalmente como funcionan las cosas" entonces podremos ayudarte no solo a ser un mejor ser humano pero lo que te va a ocurrir físicamente en términos de tu salud y tanto más.

"Todo lo que podemos hacer par construir un modelo de como funciona la biología, y en particular como el cerebro humano funciona, como el ADN funciona, como se dan los tejidos de proteínas, todo este género de cosas, es un paso muy serio para la humanidad. Por lo tanto, lo mismo para todos los grandes desafíos como establecer la secuencia del genoma humano. Existen actualmente empresas y fundaciones dedicadas a edificar bases de datos de ADN para ser utilizados en dinamizar un modelo del diagnóstico individual de las enfermedades. En ellas, con solo apretar un botón, se desencadenan las secuencias las cuales permiten conocer cual es el mal. En otras palabras, el uso de herramientas analíticas en un mundo analógico e histórico es un gran cambio".

Para intentar comprender el mundo incógnito en el cual estamos sumergidos han aparecido varias obras fundacionales. Entre ellas: Out of Control de Kevin Kelly (1994), Being Digital de Nicholas Negroponte (1996), The Road Ahead de Bill Gates (1997) y The Age of Spiritual Machines de Ray Kurzweil (1999). Ellas abrieron, y no son las únicas, una primera ventana sobre un mundo recién nacido. 15 años más tarde varios mutaciones han tenido lugar. Es probable que La Nueva Era Digital nos proporcione una "in-visión" sobre lo que nunca terminaremos de entender a plenitud porque somos agentes activos y pasivos de nuestra transformación.

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