GRECIA: LA TRAGEDIA DE LA INSOLVENCIA

José Rafael Revenga                                 Mayo 27, 2011

Hace un año Grecia recibió un préstamo de emergencia por 110 mil millones de euros para hacerle frente a un inminente incumplimiento de los compromisos de pago generados por su deuda soberana. El FMI, el Banco Central Europeo y  varios bancos centrales y privados europeos lograron organizar el paquete de rescate y así evitar una debacle financiera en la Euro zona. Ver: Grecia en ruinas... y ¿España también? (08.03.10) y  El festín de Dionisos (10.05.10).

Hoy se encuentra nuevamente al borde de la insolvencia pero con la diferencia que nadie sabe como financiar el paquete de rescate. Grecia ha sido incapaz de aumentar la fijación y la recolección de impuestos ni de proceder a la venta de activos gubernamentales ni de reducir el gasto público burocrático.Además, en el transcurso de los últimos 12 meses, Portugal tuvo que ser auxiliado con un paquete de 80 mil millones de euros lo cual no evitó la caída del gobierno del primer ministro José Sócratesel 23.03.11 mientras que el gobierno de Rodríguez Zapatero sufrió un  durísimo revés electoral el 22.05.11 al tratar de imponer un conjunto de medidas restrictivas del gasto público sin generar empleos.

La cancillera y el ministro de finanzas alemán se oponen en la actualidad a una reprogramación de la deuda soberana de Grecia. Esa "solución" evidenciaría la imposibilidad del estado griego de cancelar en la fecha de vencimiento acordado unos 60.000 millones de euros este año. Se trataría de canjear unos bonos por otros extendiendo su plazo de vencimiento. En realidad esta solución es conceptualmente un "default". Y como advirtió el jefe de las finanzas alemán, no hay precedente que pueda ilustrar los efectos de dicho acontecimiento sobre la moneda asociada, en este caso el euro. Se calcula que de hecho los tenedores de los bonos actuales tendrían que aceptar un 40% de perdida del valor nominal de los papeles.

Si llegara a aprobarse dicha reprogramación, el euro se tambalearía. La opinión de los expertos es que Grecia tiene que asumir con toda seriedad su capacidad de recolección impositiva y la venta urgente de activos en manos del estado tales como la licencia monopólica sobre todo tipo de juego de apuestas, los dos principales puertos y servicios de infraestructura. La deuda total de Grecia equivale a vez y media el valor de su economía nacional durante el 2011 o sea 160% del PIB.

La tranca está en que es difícil que la venta de activos concluya positivamente a corto plazo antes de que se venzan las exigencias. Entre otros activos, la lista incluye los dos principales puertos del país en Atenas  y Tesalonika -en los cuales estaría interesada China-, un banco, una empresa de telecom y un acueducto.

La única otra opción presente es que Grecia abandone la Euro zona lo cual pudiera acarrear la salida de Irlanda y Portugal y como reacción en cadena la de España e Italia.Esto conduciría al inevitable drástico rearreglo  del acuerdo multinacional basado en una moneda única.

Si el Banco Central Europeo no flexibiliza  las reglas  que estipulan que los bonos reestructurados no puedan utilizarse como garantía de nuevos préstamos, el impacto negativo sobre esa entidad y los 17 bancos centrales  poseedores de unos 130 mil millones de deuda griega, sería suficiente para generar un gigantesco maremoto financiero.

Nouriel Roubini, profesor de economía de la Universidad de Nueva York, lo viene advirtiendo en términos dramáticos:

"El contagio, la contaminación y la perdida de credibilidad se desarrollan bajo nuestros ojos dado que la deuda griega es insostenible y su paquete de recortes del gasto público está desfasado; el rescate de los bancos de Irlanda ha destruido la capacidad crediticia soberana y está en riesgo el que pueda seguir apoyando a esos bancos; Portugal ha perdido su acceso al mercado de valores y el rechazo del Banco Central Europeo para proponer alguna formula de ayuda ha encendido de nuevo la inestabilidad financiera".

Los expertos de la Unión Europea y del FMI se encuentran actualmente en Atenas para evaluar si el programa de recortes fiscales y de privatizaciones está en marcha. La meta es reducir gastos y vender activos por un total de 50 mil millones de euros de aquí al 2015. De su informe final a ser presentado el próximo 6.06 dependerá que tipo de solución provisional se encuentra a la mano. El principal partido de oposición está de acuerdo con la privatización pero no concebida únicamente como recurso de caja a corto plazo el cual no incidirá en la estimulación económica.

En todo caso, la agonía del euro ya ha comenzado pues como dicen los cognoscenti: "no puede haber unión monetaria con anarquía fiscal de parte de algunos de los asociados".

Todo este proceso tiene su reverso político. El miércoles 25.05  la plaza central Syntagma  de Atenas se llenó de unos 10.000 mil  "indignados" inspirados directamente en la concentración pacífica ocurrida en la Plaza del Sol en Madrid. Ese mismo día unos 15.000 manifestantes protestaron en Tesalonika y otras ciudades del norte del país.Una huelga terminó en hechos violentos. La poderosa central sindical de los empleados públicos propone otra para principios de junio.Otros consideran que es necesario un referéndum como consulta directa con el pueblo para aprobar los recortes.

 PROTESTAS EN ATENAS


La conclusión es solo una: el gobierno del primer ministro GorgePapandreou no tiene la capacidad de implantar las reducciones -6 mil millones de euros en el 2011- y de hacerle frente ni a los acreedores internacionales ni a los manifestantes que además enarbolan un ataque justificado contra la corrupción generalizada en el gobierno.Los partidos de oposición se rehusan a prestar su apoyo político al paquete de recortes con el cual se comprometió Papandreou hace un año.

En fin,  tanto el gobierno griego insolvente como la troika integrada por el FMI, el BCE y la Unión Europea tenían que tener la casi certeza hace 12 meses que Grecia no tendría la capacidad funcional de reducir su deuda. Hoy, un año más tarde, se plantea de nuevo el mismo dilema: prestar a quien no quiere o no sabe como cancelar o asumir la debacle. Si de alguna manera afortunada e ingeniosa se logra capear la crisis este año, el mismo fenómeno se repetiría el año próximo pero sin ninguna posibilidad de renovar el pagaré.

Si Alemania,  junto con otras naciones europeas, acude en ayuda al participar en un nuevo paquete de rescate, el gobierno de Angela Merkel también caería dada la opinión pública mayoritaria que se opone a que se utilicen recursos alemanes para solventar un gobierno cuya ejecutoria económica y social está basada en "gasta ahora y que otro pague". 110 mil millones de euros no han sido suficientes para pagar la cuenta, se requieren otros 60 mil millones de euros para seguir quebrando los platos durante el 2012 y 2013.

Grecia tendría que colocar unos 27 mil millones de euros en bonos en el 2012 pero el escepticismo galopante en cuanto a que pueda hacerlo y su incapacidad socio-política para acometer el plan de ajustes va a acelerar la crisis la cual debe estar al rojo vivo en cinco meses si no antes. A fines de junio -el 29- las instituciones financieras internacionales considerarán si es procedente entregar la quinta remesa  de la ayuda acordada hace un año: 12 mil millones de euros. El gobierno griego ha anunciado que sus reservas internacionales se agotarían el 15 de  julio de no recibir esa remesa y por consiguiente no podrá cancelar salarios, pensiones y obligaciones.

En todo caso, la caída en el precipicio de la insolvencia seguramente transcurrirá de manera progresiva de aquí a mayo del 2012.

Hoy, 27.05.11,el partido socialista ha concertado una reunión de emergencia con los cuatro principales partidos de la oposición para ver si se logra establecer un consenso sobre el programa de recortes.

 PROTESTAS Y HUELGAS