José Rafael Revenga Septiembre 07, 2014
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Un equipo de "piratas" en Google se encuentra a cargo de la invención de los trastornos radicales venideros de cómo viviremos.
El ritmo hiper-acelerado de innovaciones en el mundo digital nos toma por sorpresa a cada segundo. Un acontecimiento de hace poco tiempo prefigura lo que estamos por ver y lo que casi no alcanzamos a imaginar.
Regina Dugan, directora de DARPA (Defense Advanced Research Projects Agency, hacer clic), la legendaria institución del Departamento de Defensa de los EE.UU., clave para la invención de IN a pesar de no sospechar que estaría dando lugar a la dimensión de la interconectivad global, se retiró después de tres años en sus funciones para incorporarse como ejecutiva al máximo nivel en la empresa Google como jefe del equipo ATAP, una plataforma ultra-secreta de innovacion y experimentacion.
Por razones obvias, DARPA es de las organizaciones más secretas en el mundo a pesar que ha desarrollado tecnologías de avanzada que luego han gravitado hacia el mercado civil como el sistema GPS.
Dugan se incorporó en Google hace un par de años y hoy en día dirige el grupo de operaciones especiales denominado Advanced Technology and Projects (ATAP).
La fuerza de tarea (task force), a cargo de Dugan, concentra su capacidad innovadora en una nueva generación de móviles que exbibirán saltos tecnológicos en los próximos cinco años.
Uno de ellos -el proyecto ARA (hacer clic)- se dedica, nada menos, que a reinventar el "smartphone" para convertirlo en una plataforma modular ("modularity") que permita ensamblar sus componentes de acuerdo con las especificaciones personales del usuario. Así, por ejemplo, seleccionaríamos cual cámara preferimos en nuestro móvil en modo similar como hacemos nuestros decenas de apps dentro de un universo de miles de ellos.
ATAP (hacer clic) no funciona como un territorio aislado poblado por genios que trabajan aisladamente el uno del otro. Su forma organizativa es, ella misma, un ejemplo innovador. El desarrollo del proyecto está a cargo de unos 150 ingenieros y desarrolladores quienes pertenecen a 20 centros de investigación localizados en universidades y empresas en tres continentes.
El talento de Dugan (hacer clic) consiste en coordinar e integrar los esfuerzos de cada uno de ellos en un empeño por dar a nacer un "imposibilia" acortando los tiempos para su manufactura y presentación al mercado.
Otro proyecto en pleno desarrollo responde a la etiqueta Tango (hacer clic). Se trata de una tableta con la capacidad de ver el mundo alrededor de sí en 3-D y replicar nuestra sensación propia de los espacios alrededor nuestro.
LA COMPUTACION CUANTICA
En un horizonte algo más lejano -más allá de los próximos treinta años- la computación cuántica será una realidad que trastocará a todo lo que nos hemos acostumbrado durante las varias generaciones de IN las cuales han transmutado sucesivamente nuestra circunstancia personal "primitiva".
Se avizora una nueva era en la cual la computación escapará de su limitante fundamental representado por su actual dependencia total de una armazón binaria en la cual la información es clasificada como "1" o "0". Es decir, "SI" o "NO".
Un grupo de científicos de la Universidad de Chicago han logrado bombardear con pulsos de un rayo laser, una región de un diamante que contenía un átomo de nitrógeno con lo cual pudieron controlar el estado de un solitario electrón (hacer clic).
En términos los más sencillos posibles, un computador cuántico opera tanto con un "1" con un "0" a la vez como con cualquier variable entre "1" y "0". Esto significa que las operaciones no están limitadas a una de dos situaciones o bits. Los computadores cuánticos, en desarrollo desde hace mas de 30 anos, codifican información como bits cuánticos o qubits que representan átomos, fotones o electrones que pueden contener múltiples estados simultáneamente. Es decir, millones de operaciones en el mismo instante.
A fines del siglo 21 la humanidad entrará en una nueva era comparable con la actual en forma similar como lo fue la Revolución Industrial a la Edad de Piedra.
Si la ley de Moore -el número de transistores colocados en un chip de silicon se duplica aproximadamente cada año- entonces en 100 años la capacidad comunicacional de nuestros dispositivos aumentaría unas inverosímiles 1.125.899.906.842.624 veces. Solo el desarrollo de la computación cuántica permitiría extender la validez de dicha ley empírica hacia el distante futuro.
SOMOS LOS ULTIMOS TESTIGOS DE LA ERA SIN INTERNET
Todos quienes nacimos antes del 1985 somos los últimos testigos de como vivíamos antes de IN. La mayoría de quienes colonizamos este planeta constituímos lo que un autor reciente, Michael Harris, denominó como "la última generación que conoció el mundo antes que hubiera surgido IN".
Somos una especie en extinción a breve plazo. Aquella que supo cómo era la vida sin IN y ahora es sujeto/objeto de la interconectividad incesante: la nueva realidad de nuestra circunstancia. Somos los últimos peregrinos que han ido del antes al después:
"Encontrándonos en esta situación nos coloca en una posición privilegiada...somos los únicos que lograremos hablar, por decirlo así, en ambos lenguajes. Somos los únicos traductores fluídos".Harris es el autor de El Final de la Ausencia ("Lo que Hemos Perdido en un Mundo de la Conexión Constante"), Su enfoque fundamental es cómo la conectividad constante modifica el comportamiento humano especialmente en el grupo demográfico de personas nacidas antes de 1985.
OTRO IMPOSIBILIA
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