31/1/11

Y AHORA EGIPTO: "TWITTEROS DEL MUNDO UNÍOS"

La plaza Tahrir en El Cairo, epicentro de las manifestaciones de protesta, Enero 28, 2011 "dia de la furia"

José Rafael Revenga                        Enero 31, 2011                                                       

En El Cairo, Alejandría y Suez  surgen el 24 y el 25 de enero nutridas manifestaciones públicas en protesta por el fracaso de un gobierno dictatorial en controlar el precio de los alimentos, en ofrecer estímulos para la creación de empleos, en castigar la corrupción de la burocracia enquistada mientras constriñe el régimen de libertades públicas.

Las acciones de protesta mantenidas a lo largo de la última semana se dirigen en contra de la dictadura ejercida por el actual presidente Hosni Mubarak quien asume el cargo en octubre de 1981 a raíz del atentado mortífero de la guardia presidencial de élite el cual tuvo por blanco al entonces jefe de estado Anwar Sadat. Mubarak ha resultado electo en cinco ocasiones a lo largo de las últimas tres décadas y ha construido una dictadura en base a la organización de fuerzas de represión paramilitares y al control de las elecciones legislativas.

¿CÓMO FINALIZAN LAS DICTADURAS?

Obviamente, los bien conocidos sucesos de las multitudes enardecidas que toman las calles en varias ciudades en Túnez  y los cuales en menos de 4 semanas produjeron la huída de quien había hecho suya  la jefatura del Estado por 23 años, han  servido de ejemplo aleccionador y han ocasionado un efecto de contagio que curiosamente se ha enraizado en primer lugar en Egipto, país cultivado por las potencias occidentales y del Medio Oriente como clave para negociar la estabilidad en la región y controlar al islamismo radical.


Las implicaciones y las consecuencias no pueden ser más ominosas. El desplome de una dictadura pone en peligro la estabilidad de una región crucial para la economía y la política mundial. Las principales potencias del mundo apostaron a los dictadores de la región como garantes de una estabilidad indispensable. Consumaron el clásico pacto con el diablo.

El segundo error fue no prever y prepararse para la eclosión, tarde o temprano, de factores de democratización generadores de desequilibrios internos los cuales darían al traste con los regímenes dictatoriales. 

Ahora habrá que rediseñar la arquitectura política de varios países de la región con la edificación de democracias en base a pueblos que aspiran al respeto de los derechos humanos y a gobiernos eficaces en mejorar sus condiciones de vida pero que han sido excluidos a la fuerza de la experiencia de convivir en libertad.

EL DESTINO DE LA DICTADURA EGIPCIA

¿Caerá la dictadura en Egipto de manera tan estrepitosa como ocurrió con su casi vecino tunecino? Es curioso y hasta motivo de alipori, leer los comentarios  de algunos opinadores quienes argumentan  que Egipto no es Túnez y que por consiguiente está a salvo de cualquier perturbación similar. 

Al aceptar  la premisa de dicha perogrullada pero no su conclusión, es necesario insistir que en las situaciones humanas siempre se da un menor o mayor grado de analogía o semejanza pero al mismo tiempo habría que recalcar que las diferencias no son blindaje para el traspaso de factores epidémicos.

No obstante, el régimen actual ha entrado en los vórtices de una dinámica que no había previsto y cuya turbulencia difícilmente amainará. Los criterios  rectores emplazados y las opciones de los cursos de acción seleccionadas determinarán la longevidad de la actual dictadura egipcia. 

Las respuestas y las acciones del presidente Mubarak han contribuido a sellar su destino: tendrá que abandonar la jefatura del estado y de las fuerzas armadas. En su refugio actual al sur de la península del Sinaí en la ciudad de Sharm-el-Sheij – lujoso resort del turismo internacional- Mubarak seguramente cavila los términos de la salida del poder la cual debería anunciarse en el plazo de una semana. La dinámica es tan caótica que los pueblos beduinos del norte del Sinaí, tradicionales enemigos de Mubarak, amenazan con emprender acciones militares con el fin de paralizar el canal de Suez.
 
LA TRAMA DE LOS ACONTECIMIENTOS



Diferentes agrupaciones políticas deciden  convocar para el martes 25 de enero una concentración en la plaza Tahrir en el centro de El Cairo para preparar “el “día de la furia”  previsto para el viernes 28 de enero después de los rezos obligatorios. La dinámica protestaría tunecina había  tenido su inicio en modo similar el 19 de diciembre del 2010. Además, los factores macro en cuanto a penuria de vida, ausencia de opciones futuras y aspiraciones frustradas combinadas con un electoralismo manipulado son, dando y quitando, los mismos para ambos pueblos.

El efecto contagio afecta especialmente a los jóvenes menores de 30 años quienes representan el 60% de la población egipcia y el anófeles propagador fue la conjugación de la utilización de facebook y twitter. Es impresionante la profusión de mensajes digitales que profesan la solidaridad entre la gente de la calle de ambas naciones y la instantaneidad con que  llaman al combate, unifican los lemas y coordinan las acciones.

LA TAXONOMIA DE LAS RESPUESTAS DEL RÉGIMEN AMENAZADO

Las respuestas puestas en marcha por el gobierno egipcio corresponden al clásico esquema de ordenar a las fuerzas policiales a reprimir sin cuartel a los manifestantes, ilegalizar todo tipo de concentración y someter los culpables a juicio y por último, clausurar el acceso a los servidores de las redes sociales. Los hechos hablarán pero no se corre mayor riesgo de equivocación si se compara el esquema aplicado con un cortafuego fallido que terminará, tarde o temprano, por prender fuego a toda la sabana.

La última novedad en el inventario de las medidas represivas por parte de las dictaduras es el cierre del acceso a IN y/o el bloqueo singularizado a twitter, facebook, youtube y google. El martes 25 de enero los tuiteros se encontraron con el rechazo del acceso a sus cuentas lo cual de inmediato alertó al mundo sobre la censura impuesta por las autoridades egipcias. El universo twitter fuera de Egipto se movilizó instantáneamente y generó un enjambre de opinión a nivel mundial recién informado  sobre la naturaleza dictatorial y las acciones represivas del gobierno de Mubarak.

EL BLOQUEO A LOS TWITTERS

 El cierre de los sitios fue progresivo. Se inició con los servidores físicos y después con los móviles. Los prestadores de servicios han tenido a su  vez que twittear que no son ellos los responsables. Por ejemplo, @VodafoneEgypt tuiteo: “We didn't block twitter - it's a problem all over Egypt and we are waiting for a solution”. Los retuiteos han estado a la orden del día. Al azar escojo uno entre miles: @TarekElganainy   لو مش قادر تنزل الشارع اطلع في البلكونة. لو مش قادر تهتف علق علم مصر على حبل الغسيل .و لو معندكش علم مصر .علق قماشة سودا #Jan25 #Ib.

Varios sitios especializados en monitorear las interrupciones del servicio twitter registran con toda exactitud hasta el segundo en que se producen. Por ejemplo, http://www.herdict.org/web/ del Berkman Center for Internet and Society de la Universidad de Harvard, informa sobre interrupciones del acceso a nivel mundial sobre cualquier sitio web y suministra un alerta al email que lo solicite. 

Es un buen ejemplo de “crowdsourcing” según el cual se recolecta información registrada por múltiples usuarios y así poder ofrecer un diagnóstico situacional en tiempo real.

El procedimiento empleado por el gobierno es reducir la velocidad de transmisión de la señal hasta  casi cero y así poder justificar que se trata de una falla de la infraestructura o de exceso de tráfico. Una estratagema idéntica fue aplicada en Irán en junio del 2009.
Las interrupciones durante los primeros días -“take downs”- no fueron totales pero sí afectaron la disponibilidad del servicio en un 90%. Los twitteros han podido sortear parcialmente las barreras de la censura utilizando “sitios espejos” y aplicaciones hechas a la medida.

Un ejemplo del uso de mensajes twitter vía facebook es el siguiente colocado el jueves 27 alrededor de las 9:30pm:

@rassdwehda arresto de  más de 350 dirigentes de la Hermandad Musulmana entre ellos Dr. Morsy Dr. Al-Arian…http://fb.me/U3kfgJiX

En Egipto no solo twitter.com se ha visto afectado. Para el jueves 27 de enero se registraron 145 negaciones de acceso a facebook.com. La bajada de la cuchilla no llega a ser un “takedown” total debido al ingenio de los nerds y seguramente a la impericia gubernamental. En todo caso, el cierre físico está acompañado por la criminalización de dichas comunicaciones lo cual aumenta su potencial como medida disuasoria.

Los signos de los tiempos señalan que una empresa en San Francisco con solo 50 empleados y cuatro años de haber sido creada puede jugar un papel de gran significado en la política internacional.
Las cifras para el jueves 27 de enero reportan una disminución del  número de accesos negados a twitter y facebook indicando que los filtros aplicados por el gobierno a nivel del proveedor de servicios internet (ISP) no son permanentes y entran en acción en momentos en que el gobierno egipcio se siente amenazado por la coordinación vía twitter de una concentración protestaria, por una declaración o foro de parte de dirigentes opuestos a él o por un evento noticioso que considere negativo. Es una censura política selectiva y discrecional y como tal una restricción indebida de la libertad de expresión.

El jueves 27 de enero leo el siguiente tweet:
@mgrooves Matt Graves "What the Herd is Saying in Egypt": great post on Egypt & blocked services from @lmiyakawa on the Herdict Blog: bit.ly/dXbL14
y procedo a consultar el documento indicado el cual
http://www.herdict.org/web/explore/detail/id/EG/2633/7 informa que durante los últimos siete días twitter.com ha estado inaccesible en 252 ocasiones.

El número correspondiente al 28 de enero se ha reducido a 4 lo cual pudiera significar la eficacia de la presión internacional. Sin embargo, facebook.com continúa caído.

El sitio Accessnow (https://www.accessnow.org/page/s/help-egypt) es un sitio privado que indica como los internautas pueden ayudar a sus  colegas navegantes en Egipto y específicamente permite bajar una aplicación anticensura (www.torproject.org y ) y solicita donar parte de mi ancho de banda para ayudar al pueblo egipcio “el cual está llamando a ponerle fin a años de corrupción, pobreza y exclusión política. 

El gobierno ha respondido con cañones de agua, gases lacrimógenos y peinillas. Facebook, twitter y gmail son bloqueados periódicamente lo cual limita los canales de comunicación a la disposición de los egipcios”.
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Para quienes no viven en la tierra de los faraones, es conveniente visitar https://www.accessnow.org/proxy-cloud/page/join-the-cloud  y convertirse en nubenautas prevenidos al bate. El sitio proporciona una guía (https://www.torproject.org/docs/bridges.html.en#RunningABridge) para cómo “puentear” el cerco de la censura.

Hay que tener en cuenta el impacto de una situación de protesta callejera grabada durante varias horas con una cámara de video de bajo costo para colocarla en un sitio web en modo “streaming” para que literalmente todo el mundo pueda verla. Por ejemplo, http://www.ustream.tv/recorded/12242462

Ya no hay que esperar la presencia de un reportero para obtener el documento para después verlo a determinada hora y por un tiempo necesariamente restringido en un canal de TV convencional. 

EL DILEMA DE LAS GRANDES POTENCIAS

La administración Obama ha fijado como línea política el apoyo a las demostraciones anti-dictaduras en el Medio Oriente. Es un cambio radical de la postura anterior que puede caracterizarse como “don´t ask, don´t tell” (“no preguntes, no digas”) si el régimen califica o no como dictadura. Según este criterio USA no cuestionaba la naturaleza del gobierno siempre y cuando éste pudiera garantizar el control del islamismo fundamentalista.

 

 Ahora USA ha cancelado dicho trueque y ha presionado la tecla “shift” dada la visibilidad mundial de las protestas. En el caso de Egipto el grupo islámico más beligerante es la Fraternidad Musulmana la cual ahora adquiere status legal y proyección como actor político.

 

La novedad en cuanto doctrina de política internacional es el enunciado de la secretaria de estado Hillary Clinton quien declara el jueves 27de enero:

 

“Urjo a las autoridades egipcias no impedir las protestas pacíficas ni bloquear las comunicaciones incluyendo las redes sociales.” 

 

Es la primera vez que explícitamente se convierte la libertad para tuitear en criterio explícito, en prueba de papel tornasol, para juzgar la naturaleza democrática de un régimen. La señora Clinton añadió respetando el léxico diplomático: “el gobierno egipcio goza de una importante oportunidad para responder a las legítimas necesidades e intereses del pueblo egipcio”.

 

Hasta ahora la postura de las grandes potencias, incluyendo Alemania, Francia, Italia y Rusia,  trata de evitar una ruptura drástica con los regímenes autoritarios lo cual conduciría a una desestabilización casi inmediata y al mismo tiempo se posicionan del lado de las masas que claman por democracia para así evitar la propagación del llamado anti-imperialista y anti-occidental el cual incendiaria aún más  la furia de quienes protestan.

 

El presidente francés Nicolás Sarkozy mantuvo su silencio en torno a los acontecimientos en Egipto hasta el sábado 29 de enero por la tarde cuando da a conocer una declaración conjunta con la jefe del gobierno alemán Angela Merkel y el primer ministro británico David Cameron la cual reza: 

"Llamamos al presidente Mubarak a evitar a cualquier precio el uso de la violencia en contra de los civiles desarmados y exhortamos a los manifestantes a ejercer su derecho de modo pacífico”. La declaración enfatiza que los derechos humanos y las libertades democráticas deben ser respetadas plenamente incluyendo la libertad expresión y de comunicación, y de manera notoria el acceso a los teléfonos y a IN así como el derecho de asociación y de manifestaciones pacíficas”.

 “EL DIA DE  LA FURIA”: Enero 27, 2011

 

El viernes 27 de enero fue designado como “el día de la furia” por los activistas democráticos. Decenas de miles de manifestantes tomaron las calles más céntricas de El Cairo, Alejandría y Suez. El gobierno del presidente Mubarak escogió la opción de “línea dura” como respuesta a la jugada táctica del lado opositor de escalar la magnitud y la agresividad de las manifestaciones. Ambas partes del conflicto han decidido alzar la parada o subir la apuesta. Mubarak impuso el toque de queda a partir de las 6pm hasta las 7am y ordenó  la presencia en la calle de efectivos militares como refuerzo de los bien entrenados batallones policiales.

 

Ocho manifestantes han muerto, barricadas móviles se han instalado en múltiples puntos y han sido asaltadas varis estaciones policiales y sedes del partido oficialista. El premio Nobel de la Paz (2005) Moahmmed ElBaradei, hasta octubre 2010 director de la Agencia Internacional de Energía Atómica por doce años, fue colocado bajo arresto domiciliario por haberse unido a las protestas.

 

LA FORMULA DE MUBARAK PARA ENFRENTAR LAS PROTESTAS

 

El presidente egipcio decidió recurrir a la fórmula casi estereotipada que las dictaduras suelen aplicar en situaciones de rebeldía callejera masiva y de la activación de numerosos grupos sociales quienes convergen en intentar ponerle punto final a un régimen enroscado en el poder para dar paso a un “nuevo amanecer”: hacer renunciar al Consejo de Ministros, nombrar un funcionario de alto nivel que pueda ocupar un cargo equivalente a una vice-presidencia ejecutiva para que actúe como amortiguador y aparente sucesor, designar a un primer ministro y si no existen crear ambos cargos que representen un nuevo poder ejecutivo o cambio de régimen. 

 Para el primer cargo Mubarak escogió a su jefe de inteligencia militar durante las últimas dos décadas, absolutamente leal y bien considerado por USA e Israel. Otro general, un respetado exjefe de la fuerza aérea, será el primer ministro a cargo del gobierno.

 El presidente Mubarak trata de aliviar las protestas designando por primera vez en sus 30 años de gobierno a un vicepresidente. Es Omar Souleiman, director de la agencia de inteligencia por casi 20 años, quien goza del respeto de USA e Israel.

 

Ninguno de los dos parece tener potencial para actuar como garantes de la continuidad del régimen pero sí como negociadores para configurar el nuevo el cual pudiera tenar un predominante componente militar en una etapa de transición de mediana duración antes de recomponer la ecuación de las fuerzas políticas y convocar a un proceso electoral y parlamentario. En todo caso los altos oficiales requerirán generar un consenso dentro de la oficialidad media.

 

 Y allí está el dilema central de la mayoría de las dictaduras: no ocuparse de la etapa sucesoral. Esta omisión no es regla universal pues Francisco Franco (1975) y Juan Vicente Gómez (1935) sí se empeñaron en resolver la incógnita del futuro y Fidel la ha diseñado y puesto en práctica una formula fraternal aunque solo la historia lo absolverá si se equivoca en cuanto al éxito de la opción seleccionada. En cualquier caso, el abuso del poder parece contener el virus de la creencia en la permanencia personal sin fin el cual contiene las semillas de su propio desmoronamiento. 

 

DESPÚES DE LA DICTADURA ¿QUÉ?

 

Mubarak cuenta con 82 años de edad y no ha preparado ni designado ningún sucesor. Hasta hace poco se rumoraba que sería su hijo Gamal de 47 años, exitoso hombre de negocios, pero éste decidió trasladarse a Londres y/o Canadá con su familia a principios de la semana pasada lo cual es un suceso poco comentado.

 

Tampoco han sido identificados los pasajeros de los 19 jets privados que salieron de Cairo el sábado 29 por la noche con destino a Dubai. Se rumora la presencia a bordo de un número significativo de hombres de negocio colegas de Gamal Mubarak.

 

Si bien la jugada de incorporar a tres generales en el más alto nivel del poder ejecutivo tiende a asegurarle a Mubarak la jefatura sobre las fuerzas armadas en la circunstancia actual, la permanencia de ellos en sus nuevas funciones debería ser más bien breve dada su identificación con el régimen. 

 

¿LOS MILITARES CON EL PUEBLO?

 

Otra de las decisiones del presidente Mubarak fue decretar el viernes 28 de enero el toque de queda a escala nacional y desplegar los tanques del ejército en la calle. Ambas medidas no solo son inútiles sino contraproducentes si no se tiene como aplicarlas. Es responder con una plantilla de acciones incapaces de anticipar, contener o dirigir la sorpresiva dinámica desatada.

 

Son instrucciones dadas a un surfista quien con su tabla se encuentra detrás de la ola para que la alcance y la maniobre sin que la próxima le propine tremendo revolcón. Es un ejemplo clásico de la inercia mental exagerada generada por el apego “stricto sensu” a los manuales de los cursos de estado mayor.

 

La presencia callejera de los tanques resulta en dos desenlaces opuestos pero igualmente desfasados con la dinámica de los acontecimientos y el estado psicológico de las partes en conflicto. Un curso de acción es el uso de estas armas en suprimir una rebeldía como la de Hungría 1956 con el consiguiente sacrificio de miles de civiles. El otro curso es el de la “revolución de los claveles” -un 25 de abril de 1974-  en Portugal en la cual los soldados y los manifestantes fraternizaron a raíz de un levantamiento militar.

Afortunadamente, en Egipto el sábado 29 de enero la dinámica de los sucesos y las acciones de sus  protagonistas anónimos han fluido por el cauce del segundo curso. Los protestatarios egipcios se han volcado a las calles el viernes 28 de enero durante la noche en flagrante desafío a las prohibiciones  tanto de hora como de las concentraciones públicas. 

 

El próximo día el pueblo en la calle abrazo a los soldados y se encaramó sobre los tanques sobre los cuales pintó consignas tales como “fuera Mubarak”. Los niños se divirtieron un mundo pues se tomaron fotos al lado de los tanques. Hubo varias situaciones en que oficiales enarbolaron banderas egipcias y expresaron su apoyo a los manifestantes.

 

El bien entrenado y equipado ejército egipcio consta de unos 500.000 efectivos y goza del aprecio general como símbolo patriótico en comparación con la opinión negativa en torno a la policía especial encargada de aplicar procedimientos represivos. De todas maneras, la imposición del indispensable orden público depende tanto del acierto de las acciones de los civiles como del buen juicio de los militares.

 

Este frágil equilibrio pudo venirse abajo la madrugada del 29 de enero cuando los manifestantes  asaltaron e incendiaron el importante edificio sede del partido oficialista y en otro suceso, la policía anti-motín disparó desde el edificio del Ministerio de Relaciones Interiores ocasionando por lo menos tres víctimas. Una de las ventajas de tener al ejército en la calle es controlar a dichas fuerzas paramilitares oficiales (Fuerzas de la Seguridad Central).

 

Por consiguiente, después de cinco días de protestas, cada vez más determinadas y numerosas, es de esperar que las fuerzas  militares decidan mantener el orden público con mayor firmeza. Además,  parecen estar dispuestas a hacer respetar el toque de queda y extenderlo por tres horas adicionales para evitar vandalismos y acciones para-terroristas. Probablemente estas consideraciones estuvieron en la agenda de la visita a Washington del comandante del ejército egipcio la semana pasada.

 

Al finalizar la semana llena de protestas in crescendo  se contabilizan decenas de bajas civiles y se nota una radicalización por parte de números grupos especialmente por parte de los jóvenes como el asalto exitoso de varias comisarías de la policía en Suez y la quema de vehículos blindados. Si las fuerzas de seguridad paramilitares oficialistas deciden escalar la intensidad de la represión hasta las pirámides y sus reverendas momias temblarían.

 

Como detalle indicativo de la percibida debilidad de un régimen que se esfuerza en concentrar todo el poder, Mubarak ordenó el viernes 28 el arresto domiciliario de Mohammed ElBaradei, Premio Nobel de la Paz en el 2005 y hasta octubre del 2010 director de la Agencia Internacional para la Energía Atómica, por haber participado ese día en las marchas de protesta.  El distinguido científico dio a conocer su opinión el próximo día: “No hay nada diferente a que Mubarak deje el poder que pueda satisfacer a la gente. Considero que lo que Mubarak dijo ayer fue un insulto a la inteligencia del pueblo egipcio".



Mohammed ElBaradei se dirige a los manifestantes en la plaza Yahrir y exige la renuncia de Mubarak

En el momento (domingo 30 de enero a las 0:48 hora local de El Cairo  seis horas y media por delante  la hora de Caracas) de redactar estas consideraciones me entero por varios de los miles de sitios informativos en IN ocupados en reseñar la pugna egipcia que Mubarak ha escogido la línea extrema sin tener en cuenta que el conflicto egipcio se personalizó en él y en su permanencia en el poder. 

 

El público continúa en los momentos actuales desacatando la orden del toque de queda y la policía disparó hoy en contra la multitud al sur de El Cairo ocasionando 17 muertes. Tendré oportunidad todo el domingo 30 de enero, antes de consignar para su publicación este documento, de darle seguimiento a la dramática y trágica realidad que vive uno de los pueblos más civilizados del planeta.

 

EL DILEMA INTERNACIONAL

 

Los principales jefes de estado se encuentran en un laberinto sin salida a corto plazo. El presidente Obama se pronunció sobre el conflicto egipcio a las 6:30pm (hora Washington) el viernes 25de enero minutos después de haber conversado telefónicamente con Mubarak quien apenas terminaba su alocución televisada por el canal oficial. Todos están  conscientes de que el tiempo apremia.

 

Las palabras de Obama revelan de nuevo que en el universo de la diplomacia internacional mientras más álgido sea el dilema más vaporosas se hacen las opiniones sobre él: “El futuro de Egipto será determinado por el pueblo egipcio” y “los gobiernos tienen la responsabilidad de responder a sus ciudadanos”.

 

No obstante, Obama volvió a insistir en el mensaje-alerta hecho público por la canciller Hillary Clinton unos días antes: “el gobierno egipcio debe restaurar el servicio de acceso a IN y a los sitios web de las redes sociales”. POTUS –el acrónimo oficial del presidente de los Estados Unidos- tiene poco tiempo para definir una posición más clara en cuanto a si apoya o no a los activistas pro-democracia en Egipto.

 

De no pasar de ciertas declaraciones tibias, Obama generaría la percepción de que USA no se decide a exigir la renuncia de Mubarak y esta dilación le traería tantas complicaciones negativas como lo sería un apoyo continuado de manera explícita. En fin de cuentas, los miembros de una alianza no son necesariamente responsables de los errores cometidos por el otro aliado. 

 

Me atrevo a afirmar que en todo esto impera una variante de daltonismo político que no deja ver las posibles discontinuidades que pueden afectar las plataformas de ejercicios del poder cuando estas aparentemente siguen una trayectoria lineal a lo largo del tiempo.

 

En verdad, USA tiene que conciliar el riesgo cierto de desatar todo un tsunami anti-norteamericano en el pueblo árabe, el cual fortalecería a quienes predican el islamismo radical, si es percibido como soporte de Mubarak o pasarse de maraca y hacer caso omiso de un entramado de poder el cual durante más de tres décadas ha servido de plataforma  aliada comandada por militares con una ley de emergencia en vigor desde 1981 y como intermediaria para negociar con Israel y más aún, contener un radicalismo religioso.

 

En Israel hay serias recriminaciones justificadas pues en esta ocasión los servicios de inteligencia fallaron al no prever ninguna posibilidad de disturbios en Egipto. Quizás la razón fue la dependencia exagerada de la información proveniente de fuentes de inteligencia militar egipcias las cuales estuvieron ciegas frente a la sorpresa. Israel es uno de los estados más afectados por el cambio de régimen de su vecino pues éste le garantizaba el control de la Faja de Gaza en cuanto a  la presencia del beligerante Hamas y en un sentido real las dos naciones configuraban un equilibrio bipolar desde la firma de los acuerdos de paz. Ahora Israel deberá renegociar cualquier acuerdo para garantizar su fiel cumplimiento.

 

EL MURO DEL MIEDO SE DERRUMBÓ

La televisión rusa ha dado especial atención a los acontecimientos en Egipto. El video corresponde al "dia de la furia"

 

Para estar informado al instante consulto los más recientes twitters y me encuentro con numerosísimas opiniones, informaciones, videos  y fotos tomadas en el momento y sitio de las protestas mantenidas durante cinco días. El denominador común de las consignas reseñadas es “El muro del miedo se ha venido abajo” y “Ya basta”.

 

Durante los primeros días el reclamo más vociferado fue “el gobierno tiene que irse” pero definitivamente a partir del “día de la furia” del 28 de enero al cual se convocó utilizando el hashtag #Jan28, la exigencia ha ido escalando y  ahora todos gritan “Fuera Mubarak”. Es bien posible que el propio aludido haya contribuido a esto con su fallida alocución del pasado viernes 28 de julio.

 

El nudo faraónico en el cual se encuentran tanto el gobierno egipcio como los factores democráticos puede cortarse de dos maneras: 1) un intento desesperado de Mubarak en cuanto a utilizar las fuerzas policiales y militares para suprimir las acciones de los manifestantes pro-democracia y 2)una salida negociada dentro del plazo de una semana.

 

Si la  primera alternativa ocurre dará lugar a una desobediencia militar que depondrá al comandante en jefe y presidente o a un baño de sangre que también precipitaría su salida. De adoptarse la segunda alternativa, entonces la urgencia para acometer las acciones es lo esencial. Si no es así, la bolita de la ruleta no se estabilizará en una casilla marcada con color negro sino que saltará a una de color rojo.

 

La apuesta hacia el futuro es borrosa –“fuzzy”- y llena de peligros y amenazas pero si los factores involucrados no diseñan una “sorpresa” definida como un acontecimiento en tiempo real que logre separar al dictador de su cargo desempeñado por 30 años, surgirá un presente de infortunio. 

 

Todos deberían reconocer la sentencia, como diría Antonio Machado, del pueblo-árbitro: ¡El juego se terminó! o en palabras de un croupier: “Monsieur, les jeux son faits” o en árabe Kefaya!   

كفاية

 

DOMINGO 30 DE ENERO, 2011: SEXTO DÍA DE PROTESTAS

 

Hoy domingo 30 de enero me encuentro que el acceso a IN está totalmente bloqueado por parte del gobierno egipcio. Es el tercer día consecutivo. Durante los días previos, el gobierno instrumentó la negación del acceso a los sitios más frecuentados de las redes sociales tales como twitter, facebook y youtube. Después, al acercarse el 28 de enero “día de la furia”, procedió a interrumpir el servicio de telefonía móvil con el fin de aminorar la facilidad con la cual los disidentes organizan y coordinan las manifestaciones de protesta.

 

Si hasta este domingo la censura a los medios digitales respondía a una estrategia incremental y selectiva, la decisión de escalar de un “takedown” a un “blackout“ -oscuridad total o desconexión radical- señala el temor de las autoridades por la aceleración de los acontecimientos impulsada por los nuevos medios de comunicación.

 

La contrapartida  para el gobierno egipcio es la resonancia generada en el universo de cientos de  millones de internautas conectados a nivel mundial que condenan el atropello. Otros gobiernos autoritarios han preferido ir a una ciberguerra con los opositores para así identificarlos, juzgarlos y en todo caso hacerles contrapeso por medio de campañas de desinformación y ataques disruptivos.

 

Un hecho inquietante se produce esta tarde con el sobrevuelo a baja altura sobre los manifestantes de dos aviones caza (F 16s) egipcios y de la profusión de tanques y otros vehículos blindados en diversos sitios en el Cairo pero especialmente en la plaza Tahrir, principal sitio de las concentraciones. Un internauta captó las imágenes de video en su celular, se las ingenia para transmitirlas y a la hora ya están a la vista en youtube. El show de fuerza militar también incluyó la presencia de helicópteros en los puntos céntricos y arterias principales de El Cairo.

 

El toque de queda está implantado desde las 4pm (9:30 am hora de Caracas) y los manifestantes lo desafían pues no han desalojado sus sitios de protesta pública. El sábado por la noche hubo saqueos por doquier y miles de presos fueron liberados sin control alguno. Es una maniobra convencional de los gobiernos amenazados la cual apunta a la siembra  del terror en la ciudadanía para justificar el control militar de la situación.

 

EL GRAN OBSTÁCULO: MUBARAK NO  SE VA

 

La situación sigue compleja, confusa y potencialmente trágica. Hay más de cien muertos y miles de civiles heridos desde el martes pasado. La Fraternidad Musulmana ha asumido un liderazgo más público e intenta desautorizar a Mohammed ElBaradei, Premio Nobel de la Paz, acusándolo de negociar con los militares mientras éste, quien hoy domingo se presentó en la plaza Tahrir a pesar de estar condenado a permanecer preso en su casa, acusó a USA de estar llamando a una democracia mientras sigue apoyando al régimen y declaró a CNN que Mubarak debe dejar el poder de inmediato. 

 

El respetado científico concluyo afirmando: “Mubarak debe desalojar y permitiruna transición sin tropiezos hacia un gobierno de unidad nacional el cual será seguido de todas las medidas necesarias para una elección libre y equitativa… Espero entrar en contacto con las fuerzas armadas bien pronto, es necesario que colaboremos. El ejército es parte de Egipto”.

 

WASHINGTON HABLA MÁS CLARO

 

Washington, a su vez, reafirma la declaración de Hillary Clinton del jueves 27:” Como socios que somos, nosotros creemos firmemente que el gobierno egipcio debe dialogar inmediatamente con el pueblo egipcio y llevar a la práctica las necesarias reformas económicas, políticas y sociales”. El influyente senador John Kerry, presidente de la Comisión de Asuntos Exteriores del Senado USA, opina que se deben organizar elecciones presidenciales en el 2011 para sustituir al actual jefe de estado egipcio y que los manifestantes deben emular los ejemplos de Martin Luther King Jr. y Mahatma Gandhi.

 

A última hora parece que la Fraternidad Musulmana se une a las fuerzas de oposición en apoyar el rol de ElBaradei como negociador frente al gobierno. Mientras tanto efectivos del ejército han comenzado a disparar balas de verdad y el último servicio de acceso a IN que se mantenía en operación para sus clientes empresariales como Coca-Cola, Lafarge y ExxonMobil fue desconectado debido a que había facilitado sus códigos de enlace a los activistas.

 

BLOQUEO A AL YAZIRA

 

Mientras tanto la desesperación y el desacierto siguen caracterizando las respuestas del gobierno egipcio. Éste ha decidido bloquear en el satélite Nilesat las transmisiones de la prestigiosa e influyente cadena de televisión panárabe Al Yazira después que ésta reportó que había 120.000 manifestantes en el centro de El Cairo y unos 100.000 en Mansura, todos desafiando el toque de queda el cual ha sido ampliado en una hora adicional a partir del lunes 31 de enero. El gobierno también ocupó las oficinas e instalaciones de la cadena en El Cairo.

   

El director general de la TV noticiosa respondió:

 

“Independientemente de los múltiples intentos de las autoridades egipcias para restringir e impedir nuestra cobertura, Al Yazira continuará su cobertura integral de los importantes eventos desarrollándose en Egipto”. Si Mubarak contaba con amigos en el mundo árabe moderno y popular, después de esa medida los habrá perdido. Y todo para nada pues la red televisora logró establecer una conexión alterna y mantiene la transmisión de sus siete equipos en El Cairo y otros en las principales ciudades.

 

En Washington hoy domingo se habla de “una transición ordenada” y la necesidad de asegurar que en el nuevo gobierno la opresión no eche raíces. La gran pregunta que se agita en el ambiente periodístico es la de saber si USA o algún otro país concedería asilo a Mubarak. Arabia Saudí ya es anfitriona pro tempore del depuesto presidente tunecino y su rey ha declarado estar opuesto a las manifestaciones de protesta.

 

Supuestamente Mubarak se reunió el domingo por la noche con el alto mando militar uno de cuyos integrantes regresaba de una visita a Washington. Los militares egipcios han decidido ceder el control del orden y de la seguridad pública a una “renovada” fuerza policial a partir del lunes 31 de enero lo cual parece indicar que no están dispuestos a enfrentar dicha engorrosa responsabilidad. El ejército permanecería presente solo en la plaza Tahrir.

  

Todo esto indica un conflicto entre los militares y la policía paramilitar junto con los cuerpos de seguridad dependientes del ministerio de relaciones interiores quienes aparentemente son más incondicionales del régimen.

 

El domingo por la noche  10 Downing Street hizó público un comunicado del primer ministro señalando que “las restricciones a los medios y a IN eran inaceptables y debían ser levantadas inmediatamente”.

 

Como si falta hiciera falta alguna noticia calamitosa adicional USA anunció al cierre del domingo la decisión de proceder con la evacuación de miles de ciudadanos norteamericanos presentes en Egipto que deseen salir. Es una decisión que conlleva enormes complicaciones logísticas y que presagia una apreciación negativa sobre el desarrollo de la conflictividad en Egipto.

 

¿QUÉ SE PUEDE ESPERAR?

 

El cuadro al cierre de la semana es el siguiente: decenas de miles de manifestantes permanecen en los sitios públicos que han tomado  para sus concentraciones en abierto incumplimiento del toque de queda y el gobierno está fuertemente presionado para no utilizar ninguna forma de violencia en contra de los protestantes pacíficos. La cancillera alemana habló largamente el domingo por la tarde con Mubarak y supuestamente no escatimó palabras en insistir sobre ese punto.

 

Si la racionalidad imperara en la volición de todos los actores entonces se pudiera contar con algunos días para resolver algunas de las incógnitas más inmediatas propias de la extinción de una dictadura y de los pasos iniciales de las etapas que concluyan en una democracia de diseño propio que está por nacer en la plaza Tahrir. Condición sine qua non: el rais tiene que dejar de serlo. 

Hoy domingo la secretaria de estado Hillary Clinton asomó lo que algunos piensan puede ser la formula de salida del laberinto. Al responder la pregunta de si ella pensaba que Mubarak podría sobrevivir a las protestas contestó: 

“Eso depende del pueblo egipcio. Pero ya tenemos un calendario que establece que las elecciones para el próximo presidente están agenciadas para setiembre próximo  o sea ya hay un evento real programado en el calendario que conmina la acción”. O sea, se trata de dar con una formula transicional sujeta a que Mubarak no sea parte de ella. Sin embargo, los aspectos logísticos, legales y políticos asociados con un llamado a elecciones presidenciales y parlamentarias para el próximo mes de setiembre no han sido debidamente considerados.


Washington ha llevado a cabo intensas consultas con Riyadh pues el rey de Arabia Saudí calificó a los manifestantes como “extremistas” coincidiendo paradójicamente con el líder de Libia quien defendió al presidente depuesto de Túnez expresando sus deseos de que permaneciera en el cargo “toda la vida”. A los pocos días Al-Gaddafi cambio de parecer para alinearse con las fuerzas pro-democracia seguramente por darse cuenta del beneficio para los partidarios del islamismo fundamentalista.



Y AHORA…

Seguir la pista trazada por los acontecimientos en Egipto, obviamente impulsados por los ocurridos en Túnez, es descubrir una nueva sorpresa que la historia nos ha dado: una dictadura que luce exsangüe antecede a un régimen que se desea democrático. Sin embargo, la perplejidad, el asombro y una elevada dosis de incertidumbre nos acompañan una vez más pues los servicios que usualmente nos presta la inteligencia –personal o institucional- están habituados a procesar trayectorias inerciales.

 

Mirar fuera de la caja, tratar de ver lo que se encuentra a la vuelta de la esquina es adentrarnos en lo desconocido, en lo incierto y por lo tanto en una realidad angustiosa. El venido a menos de la dictadura egipcia ha tomado por sorpresa a los actores políticos internacionales y parroquianos. De allí la dificultad en cortar el nudo faraónico de un régimen treintañero, el cual venía  de amañar exitosamente las elecciones parlamentarias a fines del año pasado, para así dar paso a una nova-democracia por armar.

El eminente pensador y versado estratega Yekezkel Dror en un documento seminal (How to spring surprises on History presentado en la Conferencia Internacional "When Patterns Change: Turning Points in Inter­national Politics") -el cual nos fue facilitado por Luis Enrique Alcalá (autor del previsivo documento “Sobre la posibilidad de una sorpresa política en Venezuela” con fecha del 27 de septiembre de 1987) -, nos aclara la fuerza de los factores inerciales y explica por qué nos siguen sorprendiendo las “sorpresas” cuando ya deberíamos estar acostumbrándonos a ellas lo cual no disminuye su carácter novedoso pero si puede aumentar nuestra capacidad para manejarlas y hasta prepararlas para así “sorprender a la historia” o lo que suena menos pomposo  “planear discontinuidades”:
 
“En términos de la teoría de inteligencia estratégica y el aná­lisis de percepciones e imágenes, el problema no es visto - con razón - como el de "sorprender a la historia", sino como el de sorprender a las expectativas, las que, a su vez, están en parte basadas en la historia y sobre supuestos explíci­tos o implícitos de continuidad”.

“El problema es el de si, cómo y cuándo pueden ser vencidas o evadidas las fuerzas de la inercia y el conservatismo dinámico, como para que sea posible la innovación contra-con­vencional y contra-tendencial. ¿Dependemos acá de gobernantes innovadores especiales, o puede uno diseñar organizaciones de ruptura que, como "islas de ex­celencia", permitan escapar de los aspectos usuales de la política del "establishment"?

Dror se extiende casi proféticamente: “Yendo de estas consideraciones generales como marco de referencia al mundo contemporáneo, permítaseme ofrecer la tesis de que la probabilidad de discontinuidades está aumentando, proveyendo situaciones en las que es posible estimular o hacer surgir algunas discontinuidades mediante interven­ción consciente”.

NOTA: Un amigo twittero me señala el siguiente documento que es
parte de un Manual de Sobrevivencia en Dictaduras:

 ¿Cómo sobrevivir un apagón de Internet?

 



24/1/11

CRISIS EN TÚNEZ: MUTATIS MUTANDA




José Rafael Revenga                                                Enero 24, 2011

  
El desplome de las dictaduras y su relevo  por gobiernos pluralistas no ha recibido la atención merecida por parte de los estudiosos de las ciencias políticas y de los ejecutantes de la praxis política, de la política como oficio o “statecraft”.

Al contrario, la ruta inversa recorrida por quienes pervierten el orden democrático para dar paso a una “toma” del poder y así proceder a instaurar una autocracia con seguro destino totalitario ha sido objeto de múltiples consideraciones. Ya en 1979 el célebre pensador francés Jean-Francois Revel lanzaba su tesis sobre “Cómo terminan las democracias” y durante la última mitad del siglo XX aparecen varios análisis sobre como las virtudes que las definen son a su vez las debilidades que las vulneran.

DE LAS DICTADURAS A LAS DEMOCRACIAS
Túnez con 10 millones de habitantes situada entre Argelia y Libia
 













Los acontecimientos sucedidos en Túnez  a partir de mediados de diciembre pasado los cuales han puesto fin a una dictadura ejercida por su presidente Zine El-Abidine Ben Alí durante los últimos 23 años, constituyen una valiosa brújula que permite trazar algunos factores genéricos que pudieran estar presentes en dinámicas análogas. Ben Alí llega al poder mediante un golpe de estado que depone al legendario padre de la independencia tunecina Habib Bourguiba el 7 de noviembre d 1987.

Lejos de ser un esclarecedor pero estéril ejercicio académico, la identificación de algunos de los vectores desencadenantes de la ruptura tunecina y de la  metodología del manejo –acertado, insuficiente o contraproducente- de las situaciones inéditas hasta ese momento se ha convertido en materia de toda urgencia para quienes ejercen el poder en forma similar en varios países árabes tales como Argelia, Libia, Egipto y las petro-monarquías.

TAXONOMÍA  DE LAS RESPUESTAS

Un primer error estratégico, el cual parecer ser el síndrome propio de los dictadores, es subestimar la intensidad del maremoto popular lo cual los conduce a respuestas tardías, inadecuadas y no creíbles. Los vectores de fuerza activados en el caso de Túnez son el costo básico del nivel de vida -cuadruplicado en las últimas semanas-, la represión y la corrupción a toda vela. Por eso algunos periodistas la calificaron como la “Revolución del Pan”. Ahora también se la conoce como la “Revolución del Jazmín” pues su perfume anuncia la primavera de la democracia en muchos países árabes.

EL BUHONERO QUE HACE CAER A UNA DICTADURA

DICIEMBRE 17, 2010




La repuesta inicial del presidente Ben Alí al desencadenarse las protestas públicas inéditas durante dos semanas tuvo lugar solo el 28 de diciembre.  Las acciones se gestan de manera muy especial por parte de los jóvenes y de los miembros de la Asociación Tunecina de Mujeres Demócratas como consecuencia de la inmolación estilo “bonzo” el pasado 17 de diciembre de un joven vendedor callejero -Mohamed  Bouazizi- después que la policía le confisca sus legumbres y frutas. La primera manifestación ocurre el 19 de diciembre en la pequeña ciudad Sidi Bouzid con una población de 40.000 habitantes y escenario del sacrificio del buhonero. 

El marco mental de la respuesta por parte del gobierno ha sido una versión de la receta clásica de entregar algo a cambio de mantener casi todo cuando esa aritmética proviene de una lectura situacional defectuosa. Es el síndrome del “gattopardismo” definido en italiano como “disponibilità a cambiamenti di facciata per conservare opportunisticamente intatto il privilegio.

DICIEMBRE 22, 2010

Otro joven desempleado, también habitante de Sidi Bouzid, decide poner fin a sus días y de manera intencional se sube a un poste de alumbrado público, clama “no más miseria, no más desempleo”  y entra en contacto con los cables de alta tensión. De inmediato el pueblo nuevamente se lanza a la calle.

DICIEMBRE 28, 2010

El presidente Ben Alí reconoce por primera vez en público los sucesos recientes y expresa su pesar por ellos.  En el mismo discurso dice comprender “la dificultad generada por la situación del desempleo y el impacto psicológico sobre quien la sufre”. Sin embargo, aprovecha la oportunidad para denunciar su “instrumentación política”.

El presidente Ben Alí visita a Mohamed  Bouazizi en su lecho en el hospital de Sidi Bouzid en una evidente maniobra mediatica.  Cinco días más tarde el héroe-mártir fallece. Dos semanas déspues el presidente es derrocado y huye..(Diciembre 28, 2010)
En todo caso, Ben Alí procede con una rutinaria acción mediática y a  los doce días del acto del mártir y cinco días antes de su fallecimiento, decide visitar al paciente en su lecho en el hospital. Más aún,  invita a su familia a una reunión en el palacio presidencial. Una  fútil maniobra para apaciguar las manifestaciones surgidas en varias ciudades tunecinas y la propagación de la acción del joven vendedor en otros países árabes, especialmente  en Egipto donde ocurren tres actos de auto-inmolación como protesta pública.
Para comienzos del 2011 las manifestaciones se propagan a varias ciudades del país alimentadas por la brutal represión policial.

CRONOLOGÍA DE UNA CAÍDA: ENERO 10, 2011



El 10 de enero, el presidente Ben Alí decide dirigirse a la nación con el consabido llamamiento a la calma, la calificación de la violencia pública como “actos terroristas” y ofrece no presentarse a las elecciones del 2014; dejar a un lado la modificación de la Constitución la cual eliminaba la edad tope para presentarse como candidato presidencial; prohibir a la policía nacional disparar en contra de los manifestantes; liberar a los blogueros presos y eliminar la censura a IN y como  último caramelo tranquilizante crear 300.000 empleos. Además, sustituye al ministro de Relaciones Interiores.

El presidente Zine El-Abidine Ben Alí huye el 14 de enero del 2011. La primera dama Leila Trabelsi se había fugado el día antes acompañada por lingotes de oros por un valor de 46 millones de euros
Acciones o medidas unas cosméticas, otras falaces y todas insuficientes. La primera dama y antigua peluquera Leila Trabelsi de Ben Alí, a los 54 años de edad cuenta con 20 menos que esposo. Es conocida como jefe del clan familiar Trabelsi y aspirante a suceder a su esposo en la jefatura gubernamental como regente del hijo de ambos quien tiene 5 años de edad. La señora Trabelsi emuestra mayor sagacidad en su apreciación del futuro inmediato que la sala situacional presidencial y decide abandonar el país junto con sus dos hijas para dirigirse a Jeddah en Arabia Saudí. Lo hizo, acompañada, según los servicios de inteligencia de Francia, por un cargamento de tonelada y media de oro en lingotes con un valor aproximado de 46 millones de euros.


 Los manifestantes, incrédulos frente al ya conocido verbo presidencial, continúan sus acciones públicas. El gobierno abandona su ineficaz apertura conciliatoria y durante el 12 y el 13 de enero, con tanques en las calles, se produce el temido baño de sangre con decenas de víctimas. Los militares decretan el toque de queda ritualista el cual es desafiado en la calle.




ENERO 14, 2011

El 14 de enero, a los treinta días del acto de desesperación humana del buhonero, las manifestaciones en las principales ciudades tunecinas son incontenibles y exigen la dimisión del presidente con el grito de “!Ben Alí fuera!”.

Efectivamente, ese mismo día y después de haber decretado el “estado de emergencia” que permite a la policía disparar contra el público, Ben Alí huye a Arabia Saudí. El primer ministro Mohammed Ghannouchi asume la presidencia provisionalmente y declara que Ben Alí es “incapaz de ejercer sus funciones”. El presidente interino promete convocar a elecciones presidenciales y parlamentarias dentro de dos meses. 

Esta acción extrema revela una completa improvisación y una profunda debilidad. Lejos de aplacar los ánimos, es interpretada como un intento de perpetuar la estructura del poder establecido ya que en el plazo fijado los partidos de oposición y las organizaciones sociales no pueden aprestarse para competir. En otras palabras, una pobre maroma mal ejecutada de parte del gobierno.

La comedia de improvisaciones se extiende pues el Consejo Constitucional dictamina que el primer ministro Ghannouchi no puede ocupar la presidencia de la nación. En consecuencia él abandona el cargo interino horas después de haberlo asumido y la presidencia es asumida por Fuad Mebazaa quien presidía la Asamblea. Ambos, el primer ministro y el presidente, renuncian a su militancia en el partido de Ben Alí después de  pertenecer a él durante dos décadas. En un primer momento de su presidencia interina la cual dura unas 48 horas, Gannouchi intentó calmar la furia del pueblo tunecino prometiendo elecciones parlamentarias a muy corto plazo las cuales ya habían sido anunciadas por el entonces presidente Ben Alí.

La estratagema de Gannouchi claramente evidenció que su diseño operativo  apostaba al pronto retorno del ex presidente cuya ausencia del centro del poder sería cuestión de solo algunos días. De hecho,   Gannouchi mantuvo estrecho contacto comunicacional con el dictador durante los primeros días del abandono de la jefatura del Estado. Este  proceso de tomas de decisiones insuficientes y con una supuesta eficacia casi mágica revela la ceguera y el cálculo político fallido de quienes han sido deformados por el uso abusivo del poder.




ENERO 17, 2011

El 17 de enero, el primer ministro Gannouchi intenta formar un “gobierno de unidad nacional” para así poder desinflar la presión popular al incorporar 4 ministros de la “oposición”. Pero el gobierno no cede en lo sustancial sino en las apariencias pues los ministerios cruciales, entre ellos Defensa, Hacienda, Relaciones Exteriores e Interior, continúan en las manos de los mismos ministros del régimen saliente. Los cuatro ministros –tres de ellos representantes de la central sindical UGTT- renuncian el martes 18 de enero a menos de 24 horas de haberse encargado. La consigna que proyectan hacia la calle es: "No seremos parte del Ejecutivo mientras estén ministros del anterior régimen". El factor por tomar en cuenta es la fuerza del movimiento laboral que declara desconocer al Gobierno.

Frente a ese planteamiento, tanto el nuevo presidente como el primer ministro declaran haber renunciado al oprobioso partido lo cual es nuevamente una concesión risible,  ineficaz y  pone de manifiesto  la insensibilidad de los gobernantes en relación a la dinámica de repudio desatada hacia ellos.

El gobierno permanece colgado de una nube y el llamado “nuevo gobierno de unidad nacional” no responde a las expectativas populares. La calle pide que el partido de Ben Alí –la Asamblea Constitucional Democrática (RCD)-,  conocido como el “partido de la dictadura”, sea disuelto.

Ninguna de estas jugarretas es eficaz pues ninguna presta atención  al clamor popular el cual clama  por una nueva gobernabilidad:"Alí Babá se ha ido, ahora deben marcharse los 40 ladrones".

ENERO 19, 2011

El 19 de enero el presidente interino afirma en un mensaje televisado que él se propone “una ruptura completa con el pasado” y procederá a “satisfacer todas las aspiraciones legítimas de la sublevación”. En el mismo discurso promete una amnistía general, la libertad total de información, la independencia de la justicia y la separación entre el Estado y el partido oficialista.

ENERO 20, 2011




El 20 de enero los manifestantes se congregan frente a la sede del partido oficial solicitando su disolución. La policía se ve obligada a disparar al aire. El primer ministro promete la legalización de  varios partidos de la oposición y la liberación de todos los presos políticos. La furia en la calle no disminuye y la probabilidad aumenta de nuevas fatalidades por sumar al centenar de víctimas desde mediados de diciembre.

ENERO 21, 2011 

El 21 de enero, más de 1.200 personas supuestamente agentes de represión del gobierno de Ben Alí y 33 de sus familiares son  interrogadas  y  arrestadas. Al mismo tiempo, miles de manifestantes ocupan las calles y denuncian al gobierno interino como un fraude. Las casas de un amplio número de familiares de Ben Alí, todos ellos altos funcionarios y miembros de la cleptocracia favorecida, son saqueadas. El primer ministro Ghonnouchia cuenta con el desfavor  de la opinión pública la cual se refiere a él como “Monsieur Oui-Oui” por acatar ciegamente las órdenes de Ben Alí.

ENERO 23, 2011

 

Dos de los  más  cercanos colaboradores del presidente fugado, el presidente del senado y antiguo ministro de relaciones interior y el consejero presidencial, son arrestados y puestos en régimen de residencia vigilada. Las “servicios competentes” buscan capturar a una tercera personalidad quien era ministro de la presidencia responsable por el manejo de la información y arquitecto de la “política” del presidente derrocado.

 

Mientras tanto, más de mil manifestantes provenientes de ciudades del interior marchan en la “Caravana de la Liberación” para concentrarse en la capital el domingo 23 de enero y exigir la renuncia de todos los ministros del gobierno de Ben Alí.

 

El primer ministro multiplica sin fin sus promesas de retirarse de la política después de un periodo de “transición” y anuncia la “libertad total de información” por lo cual elimina la requerida “autorización previa” para la importación de libros, revistas y películas. A pesar de sus ofrecimientos la credibilidad del primer ministro es nula y la UGTT  (Unión General de Trabajadores Tunecinos) desafía al gobierno por medio del llamado a una huelga ilimitada hasta lograr la disolución total del gobierno y la designación de un nuevo equipo.

 

Otro acontecimiento lleno de significado futurista es la concentración de las fuerzas policiales frente a la sede de la central sindical manifestando su arrepentimiento y solicitando el perdón por los atropellos y actos de violencia cometidos en contra de los manifestantes. Fueron recibidas con consignas como “los policías no son enemigos del pueblo” lo cual es un gesto conciliatorio con los casi cien mil efectivos que funcionaban como el factor represivo  del régimen anterior.

 

EL IMPACTO INTERNACIONAL

Una opinión editorial de la prestigiosa red global de información Al-Jazeera dice en relación a los acontecimientos en Túnez: “es un alerta para todos los líderes, bien sean apoyados por las potencias internacionales o regionales, que ya no son inmunes a  las expresiones populares de furia”

 

La reacción internacional ha sido  de variada índole. En Libia Muammar Gaddafi lamentó la caída de Ben Alí y el sábado 15 de enero en cadena de radio y TV afirmó que no existe mejor gobernante para Túnez y que su esperanza es que el mandatario depuesto pudiera durar hasta el final de su período en el 2014 y por qué no por toda la vida. Además, vaticinó que lo que les espera a los tunecinos es “el caos sin fin”. El gran culpable según el líder libio: “las mentiras transmitidas por IN”. 

 

Francia, el principal socio comercial de Túnez y con profundos vínculos históricos y culturales, se mantuvo indiferente frentes a las protestas  civiles, a la persecución de periodistas  y a la corrupción del alto gobierno de ese país del Maghreb.

El presidente Sarkozy visitó a Túnez en abril del 2008 y se limitó a decir en ese entonces “el espacio para la libertad crece”. Desde hace muchos años, Francia oficialista se escuda en el principio de no-intervención y de su incómodo status como ex poder colonial. La situación es compleja porque hay unos 700.000 tunecinos quienes viven en París y la política del gobierno se centra en el apoyo a Ben Alí como alternativa válida frente a los fundamentalistas islámicos. No obstante, el Elysée ha tenido que reversar su posición debido a las manifestaciones públicas en apoyo al derrocamiento de Ben Alí que han tenido lugar en Marsella, Lyon, Niza, Burdeos y París.

Sin embargo, la velocidad de los acontecimientos y las inadecuadas respuestas del gobierno tunecino han hecho que el Quai d´Orsay haya rechazado el pedimento del presidente Ben Alí para exiliarse en Francia en donde posee extensas propiedades. En relación a la congelación de las cuentas bancarias de la familia gobernante, Francia inicialmente se ha mostrado reticente en cuanto a ejecutar alguna acción.

La incomodidad del gobierno francés y  su acelerado “recule” se hizo clara el viernes 14 de enero al prohibir el aterrizaje del avión Falcon con el presidente depuesto a bordo cuando sobrevolaba la isla de Cerdeña con destino al aeropuerto de Le Bourget cercano a París. El día anterior aterrizaba un avión privado con un grupo de familiares directos de Ben Alí quienes se dirigieron a Eurodisney al este de París para escapar la atención de los medios. El sábado quince el gobierno francés los obligó a retirarse de su territorio  al fijar un plazo para la permanencia hasta las 14 horas de ese mismo día. El nuevo destino del clan familiar parece ser Qatar. Se estima que el ex presidente Ben Alí sea invitado a abandonar su lugar de residencia actual en Arabia Saudí a corto plazo para instalarse más definitivamente en Libia.

El clan Trabelsi –apellido de la ex primera dama Leila- posee numerosas propiedades inmobiliarias de lujo en París –entre ellas dos hotels privées en la Avenue Foch  valorados cada  uno en más 6o millones de dólares. Obviamente los integrantes del clan tienen importantes cuentas bancarias en Francia sobre las cuales ya pesa una orden judicial que impone una extrema vigilancia sobre su movilización. Sin embargo, varias organizaciones civiles, entre ellas Transparency International,  se proponen ir más allá de ese primer paso y han actuado legalmente para identificar, inmovilizar y restituir al pueblo tunecino los activos bancarios e inmobiliarios
.
El viernes 14 de enero, el presidente Sarkozy anuncia que Francia ya había tomado “las disposiciones necesarias para que los movimientos financieros  sospechosos relacionados con los activos tunecinos en Francia sean bloqueados administrativamente”.

En Egipto el gobierno  se muestra especialmente cauteloso ya que tres de sus ciudadanos  decidieron inmolarse al  imitar la conducta del joven tunecino. Hay que recordar que el Presidente Mubarak, aliado de Occidente, cumple en el 2011 los treinta años de haber llegado a la presidencia.

El Yemen presenta otra situación proclive a la desestabilización  por las ondas sucesivas de la “primavera democrática árabe” pues su mandatario tiene en el poder 32 años y los estudiantes universitarios esgrimen consignas en la calle tales como “Vete antes que caigas”.

En Argelia el sábado 22 de enero, una manifestación callejera fue impedida y prohibida por el gobierno con el resultado de más de 70 civiles y 7 policías heridos. En el país existe un “estado de urgencia” decretado en 1992 el cual ilegaliza cualquier protesta pública. El principal partido de oposición - Rassemblement pour la culture et la démocratie decidió organizar la concentración lo cual generó el acordonamiento militar de casi toda la capital  con la presencia de numerosas tanquetas. Los manifestantes agitan banderas argelinas y tunecinas. La “Liga para la defensa de los derechos humanos” declaró que continuaría organizando protestas por la carestía de la vida. El presidente Bouteflika electo en 1999 y quien modifica la constitución para permitir su reelección indefinida se siente directamente amenzado.

UNA ECUACIÓN DE PODER VENIDA A MENOS

Curiosamente el ejército no ha sido pieza fundamental en la ecuación de poder de Ben Alí. Éste construyó la base para su continuidad presidencial haciendo suyo el partido oficialista y brindando amplias oportunidades de corrupción a una elite familiar . El tercer y último factor fue el uso de la policía y de grupos violentos como instrumentos de opresión  que en las últimas semanas han sido responsable de 100 víctimas. Por el  contrario, las fuerzas armadas se han visto obligadas a controlar las protestas callejeras pero han rehusado disparar en contra de los manifestantes.

Del  lado de la oposición no hay un liderazgo claro ni unificador. Para muchos luce imprescindible disolver el partido del ex presidente Ben Alí ya que controla la mayoría de la Asamblea. No existe un partido mayoritario en la oposición al cual pueda volcarse el pueblo en la calle. Las elecciones convocadas para dentro de solo 7 semanas, seguramente como un ardid para que el partido gubernamental retuviera el poder, lucen difícil de realizar y aún más incierto su resultado y la gobernabilidad posterior.

En los últimos días los desordenes públicos se acentúan en las principales ciudades tunecinas. Se han producido saqueos y destrucciones de inmuebles. Además, bandas armadas circulan de noche disparando al azar en contra de edificios y grupos de personas. Una fuente anónima de las fuerzas armadas tunecinas ha declarado que son milicias leales al ex presidente Ben Alí. El ejército  ha decidido intervenir y mantiene  la capital cercada con tanques.

El efecto epidémico sobre los países árabes se ha hecho sentir de inmediato lo cual no implica la sustitución inmediata de las presidencias imperiales o monárquicas. Lo que sí se puede afirmar con firmeza es la urgente necesidad de mejorar las condiciones económicas del pueblo, no obstaculizar la libertad de expresión y no optar por la sustentabilidad de los regímenes en base a la opresión policial.  En Túnez los derechos humanos pasan a la primera plana y las manifestaciones públicas se multiplican.

COSAS SABIDAS Y OTRAS POR APRENDER


La manifestación inicial ocurrida el 19 de diciembre fue filmada con un celular, transmitida de inmediato y dada a conocer por twitter y colocada en facebook. El efecto fue viral en Túnez y en los países árabes.


El caso tunecino muestra diferencias notables con las de otros países. La ecuación de poder diseñada por Ben Alí no incluía a las fuerzas armadas como factor beligerante sino que se basaba en la estructura de un fuerte y coherente partido de gobierno al estilo cubano y una burocracia pública de alto nivel poblada por familiares y allegados de probada lealtad quienes configuran un clan cleptocrático.

Observadores internacionales estiman que el clan Ben Alí-Trabelsi manejaba hasta el 40% de la economía tunecina. Sectores como el inmobiliario, la industria automovilística, el turismo, los bancos y la telefonía eran directamente gerenciados por la familia presidencial. Se estima que solo el ex presidente cuenta con activos por un total de cinco millardos de dólares.

Otra columna que mantuvo a Ben Alí en el poder fue el visto bueno dado por varias potencias occidentales como contrapartida a la represión de todo movimiento islámico en Túnez autorizada por el presidente huído.
Todos los factores de esa ecuación se han visto trastornados y ahora las fuerzas armadas regulares tunecinas han asumido la imposición del orden público y ciertamente jugarán un papel protagónico en garantizar la construcción por  ciudadanos demócratas de una democracia que nunca han conocido.

En el candeloso presente los ojos de los estudiosos y practicantes de la política dentro y fuera de las fronteras del Mahgreb reposicionan sus binóculos y lupas sobre la dinámica del “caso Túnez” cuyo desenlace se mantiene como de “alta incertidumbre”. Mientras tanto, la destartalada carretilla de un buhonero héroe-mártir quedará como símbolo físico de un pueblo que perdió el miedo frente a la opresión y todos los medios incluyendo twitter, se encuentran liberados para transmitir la revolución en vivo.

A todos los ha agarrado por sorpresa el desplome de una dictadura. Tanto  el presidente  y su cohorte de  alto gobierno como las fuerzas democráticas han tenido que enfrentar un escenario sin guión preparado. El desenlace es imprevisible dado que los partidos políticos oposicionistas gozan de poca tracción electoral y la dirigencia nacional aún no  ha integrado un movimiento unitario que pueda diseñar la conducción de un intervalo de gobierno antes de unas próximas elecciones anunciadas prematuramente y de por sí complejas y llenas de interrogantes.

La presión de las exigencias por parte de la opinión pública en cuanto al mejoramiento súbito del nivel de vida, la transparencia en el manejo de la cosa pública y el rechazo a cualquier vestigio de poder de l´ancien régimen se amplifica por el destape de los medios informativos. Los protagonistas principales en la primerísima etapa de búsqueda de sustentabilidad parecen ser el sector laboral, algunos de los partidos políticos, las organizaciones civiles, los estudiantes, los jóvenes y las fuerzas armadas en cuanto al mantenimiento del orden público. La  nueva ecuación pluralista del poder tendrá que integrar igualmente al movimiento islamista tunecino cuyo líder fue liberado en octubre del 2010 tras 20 años de cárcel.

No es tarea fácil construir una nueva democracia sobre las ruinas impuestas por una dictadura y menos cuando a ésta la sorprenden los acontecimientos. Quizás, como lo sugiere el eminente estudioso Yehezkel Dror, lo más conveniente sería prepararle una sorpresa a la historia.

Manifestación en Túnez exige la salida del dictador Ben Alí, Enero 14, 2011